Demencia

La demencia es una enfermedad que deteriora las funciones cognitivas y el comportamiento social impidiendo a la persona realizar las actividades cotidianas. 

Afecta de manera progresiva las funciones neuronales del individuo, incluyendo la memoria, el lenguaje, las funciones ejecutivas, el razonamiento, la comprensión, el comportamiento y la regulación de las emociones. El resultado es la pérdida de autonomía de la persona en su vida familiar, laboral o social, llegando a ser incapaz de realizar actividades básicas de la vida diaria.  

El papel de la neuropsicología la neurología, la enfermería, la fisioterapia, la logopedia o la terapia ocupacional es fundamental para una intervención completa en todas las facetas de la vida.  

Tipos de demencias

Atendiendo al origen del deterioro podemos clasificar las demencias en primarias o secundarias. 

En primer lugar, las demencias primarias son aquellas de las que no se conoce la causa u origen de la demencia, afectan al sistema nervioso y suelen ser degenerativas, además son las más frecuentes. 

  • La demencia tipo Alzheimer es la causa más frecuente de demencia, alrededor del 50%-80% de los casos. Las principales áreas afectadas son la orientación, la memoria, el lenguaje, las funciones ejecutivas, el cambio de actividades, la deambulación o los cambios emocionales, etc.  

  • La demencia asociada a la enfermedad de Parkinson. Se caracteriza por la alteración del sistema nervioso que afecta a los movimientos, presentándose temblor en reposo, dificultad en la marcha o rigidez muscular. Presenta dificultades en la planificación, la adaptación a situaciones nuevas, la toma de decisiones y en la inhibición de respuestas automáticas. Además de abulia, obsesiones y compulsiones, aplanamiento afectivo, baja expresividad facial y depresión endógena. 

  • La demencia fronto-temporal, esta variedad aparece habitualmente entre los 45 y los 65 años y afecta a la personalidad, la conducta y el lenguaje más que a las funciones cognitivas. Tienen problemas con el pensamiento abstracto, la atención y la memoria a corto plazo y la recuperación de la información. El paciente adopta comportamientos impulsivos, pierde las inhibiciones sociales, incluidas las sexuales, descuida los hábitos de higiene, etc. En cuanto al lenguaje, tiene dificultades para encontrar las palabras adecuadas, le cuesta comprender una conversación o articular palabra.  

  • En la demencia por cuerpos de Lewy son habituales los fallos de memoria, las alucinaciones, los trastornos del sueño y alteraciones del comportamiento y del estado de ánimo ambivalentes. Comparado con la demencia tipo Alzheimer, presentan una mayor afectación de las tareas atencionales, ejecutivas y visoespaciales. 

  • Por último, la demencia de la enfermedad de Huntington. Es una enfermedad neurológica y hereditaria, con la manifestación de movimientos involuntarios en las extremidades y contracciones faciales. También se produce una disminución y deterioro de la atención, la memoria, y comportamientos depresivos o paranoicos. 

Por otro lado, tenemos las demencias secundarias causadas por una enfermedad conocida, o por trastornos que no derivan en una demencia, pero pueden manifestar síntomas típicos de estas. 

  • La demencia vascular que se caracteriza por la aparición de lesiones en el tejido cerebral, ocurren después de un accidente cerebrovascular y producen un deterioro de las funciones cognitivas afectando a la calidad de vida de las personas.  

  • La demencia producida por causas psiquiátricas. En este caso, son aquellas demencias que son causadas por trastornos psicológicos como depresión o algún tipo de trastorno mental grave como la esquizofrenia o por situaciones vitales estresantes, como la pérdida de un ser querido. 

  • La demencia por enfermedades autoinmunes o inflamatorias. Son más frecuentes en personas jóvenes, y pueden representar el 20% en las demencias en personas menores de 45 años, causadas por una encefalitis o la esclerosis múltiple. 

También existen las demencias infecciosas, postraumáticas, metabólicas y las originadas por consumo exposición a tóxicos.