Orquitis
La orquitis es una inflamación del tejido testicular que puede ser causada por infecciones bacterianas, virales u otras condiciones. Es una patología que afecta a los testículos. La orquitis puede presentarse de forma aislada o asociada a una inflamación del epidídimo, denominada epididimoorquitis.
Causas de la orquitis
La causa más común es la infección por el virus de la parotiditis (paperas), especialmente en varones pospuberales que no han sido vacunados. Aproximadamente el 30% de los hombres que desarrollan paperas después de la pubertad presentan orquitis como complicación.
Otros virus, como el coxsackie, el virus de Epstein-Barr (VEB) y el citomegalovirus (CMV), también pueden estar implicados.
Puede estar causada también por etiología bacteriana, frecuentemente asociada a infecciones del tracto urinario (ITU) o enfermedades de transmisión sexual (ETS), como Chlamydia trachomatis y Neisseria gonorrhoeae, especialmente en hombres sexualmente activos.
En varones mayores, Escherichia coli y otros bacilos gramnegativos son causas comunes, generalmente relacionadas con problemas urológicos como hiperplasia prostática benigna (HPB).
Otras causas pueden ser condiciones autoinmunes, traumatismos o reacción a ciertos medicamentos.
Síntomas de la orquitis
Los síntomas de la orquitis son: dolor testicular (generalmente de inicio rápido, unilateral o bilateral); el testículo afectado aumenta de volumen volviéndose agrandado, rojo y caliente al tacto; en orquitis bacteriana podemos encontramos fiebre y escalofríos; sensibilidad testicular; disuria, polaquiuria o hematuria en caso de ITU; secreción uretral, en ITS.
Si no se trata adecuadamente, la orquitis puede conducir a atrofia testicular que reduce el tamaño del testículo afectado, infertilidad en caso de orquitis bilateral o paperas en adultos, abscesos testiculares y epididimitis crónica.
La orquitis se diagnostica identificando los síntomas nombrados a través de una exploración física y una anamnesis médica. Se realizarán pruebas complementarias, como análisis de orina o urocultivo, para detectar infecciones bacterianas, exudado uretral en caso de posibles ITS y serología para detectar infecciones virales. Para confirmar la inflamación, descartar torsión testicular y evaluar el flujo sanguíneo se realizará una ecografía testicular con Doppler.
Tratamiento de la orquitis
El tratamiento de la orquitis depende de su causa. La orquitis bacteriana se tratará con antibióticos según el agente etiológico identificado. Para la sintomatología se utilizarán analgésicos y antiinflamatorios no esteroides (AINEs) para el manejo del dolor y la inflamación. En caso de la orquitis viral no existe un tratamiento antiviral específico, si no que se administrará un tratamiento sintomatológico, incluyendo reposo, compresas frías y AINEs. En casos de absceso o sospecha de torsión testicular, puede ser necesaria la intervención quirúrgica, como drenaje o incluso orquiectomía (extirpación del testículo afectado).
Cómo prevenir la orquitis
Para la prevención de orquitis se recomienda la vacunación de los pacientes con la vacuna triple viral que es efectiva para prevenir la orquitis por paperas. Se recomienda realizar prácticas sexuales seguras, usando preservativos o barreras de látex para prevenir cualquier tipo de infección de transmisión sexual que pueda provocarla. Una atención temprana de infecciones del tracto urinario o genital ayudará a evitar complicaciones.
El pronóstico de la orquitis depende de su causa y de la prontitud del tratamiento. En general, los casos tratados de manera temprana tienen un buen desenlace, aunque las complicaciones, como infertilidad o atrofia testicular, pueden ser permanentes en casos graves o bilaterales. Se debe realizar un diagnóstico y tratamiento oportunos para prevenir secuelas a largo plazo.