¿Cómo combatir la celulitis? ¿Es imposible?
¡Damas y caballeros, oficialmente llegó el verano! ¿Y qué supone esto?: calor, playa y como no, quitarnos las innumerables capas que llevamos en invierno y dejar nuestros cuerpos “al descubierto”. ¿Y qué se deduce de esto? La aparición de la celulitis en nuestras vidas. Bueno, en realidad deberíamos hablar de una “reaparición” porque esta característica estética no se va, solo se olvida durante un tiempo. Y esto lleva a muchas a preguntarse cómo combatir la celulitis. En este artículo te lo explicamos.
Escrito por María Belén del Río Sánchez, bióloga y médica docente del área de sanidad de INESALUD.
¿Qué es la celulitis?
La celulitis es una afección estética que se caracteriza por la apariencia de hoyuelos o piel de naranja en áreas específicas del cuerpo, como los muslos, caderas, abdomen, piernas y glúteos.
La celulitis se forma cuando las células de grasa se acumulan debajo de la piel y ejercen presión sobre las fibras de colágeno, creando una apariencia irregular en la superficie. Esta acumulación de grasa y la distensión de las fibras de colágeno pueden deberse a una combinación de factores, como cambios hormonales, predisposición genética, mala circulación sanguínea, falta de ejercicio físico, abuso de grasas saturadas o exceso de grasa corporal.
Es más común en mujeres que en hombres, y se estima que afecta a alrededor del 80-90% de las féminas en algún momento de sus vidas, independientemente de su peso o condición física. Además, es importante considerar que la celulitis es un problema estético que puede ir agravándose con la edad.
Problemas físicos y psicológicos de la celulitis
La celulitis puede tener tanto impacto físico como psicológico en las personas afectadas. Aunque sus consecuencias físicas no se consideran muy graves, pueden suponer modificaciones muy sustanciales en la apariencia de la piel, apareciendo esta como una estructura enferma y poco saludable. Además, se produce un incremento en la sensación de pesadez y una mayor sensibilidad al tacto, pudiendo derivar en molestia o dolor leve al presionar.
Las principales consecuencias derivadas de la celulitis son psicológicas. Por ejemplo, los afectados pueden desarrollar falta de autoestima y falta de confianza en su cuerpo. También se puede experimentar vergüenza y ansiedad social, junto con una preocupación constante de la apariencia física.
¿Existen diferentes tipos de celulitis?
La respuesta es Sí. Existen diferentes tipos de celulitis que se clasifican según sus características y apariencia.
Celulitis edematosa
La más común es la llamada celulitis edematosa, también conocida como celulitis blanda o celulitis acuosa. Se caracteriza por la retención de líquidos y la acumulación de toxinas en los tejidos. La piel presenta hinchazón y tiene un aspecto de la piel blando y flácido. Este tipo de celulitis suele ser sensible al tacto y puede estar asociada con problemas de circulación y sistema linfático.
Celulitis adiposa
Otro tipo es la celulitis adiposa, que se relaciona con un exceso de grasa en las áreas afectadas. La piel muestra una apariencia abultada y presenta acumulaciones de tejido graso. Es más usual en personas con sobrepeso u obesidad, aunque también puede afectar a personas delgadas.
Celulitis fibrosa
La celulitis fibrosa se caracteriza por la formación de nódulos de tejido conectivo fibroso bajo la piel. Estos nódulos pueden generar una apariencia de hoyuelos y una sensación de rigidez en la piel. Suele ser más resistente a los tratamientos y puede requerir enfoques más intensivos.
Celulitis mixta
Y finalmente, podemos hablar de celulitis mixta. La celulitis mixta es una combinación de diferentes tipos de celulitis, donde pueden estar presentes características de la celulitis edematosa, adiposa y fibrosa. Esto significa que puede haber retención de líquidos, acumulación de grasa y formación de nódulos fibrosos en la piel afectada.
¿Se puede curar la celulitis?
La celulitis no tiene una cura definitiva, pero existen diversas estrategias que pueden ayudar a reducir su apariencia y mejorar la salud de la piel. Los resultados pueden variar según la persona. No obstante, existen diferentes opciones que se emplean para mejorar esta situación.
Por ejemplo, adoptar un estilo de vida saludable puede ser beneficioso para reducir la celulitis. Esto incluye mantener una dieta equilibrada, tomar frutas y verduras frescas, beber suficiente agua, hacer actividad física regularmente, evitar fumar y el consumo excesivo de alcohol.
El uso de productos y tratamientos tópicos puede ayudar a combatir la celulitis y mejorar la apariencia de la piel. Según la Sociedad Española de Medicina Estética, se pueden usar cremas o geles que contengan ingredientes como retinol, cafeína o ingredientes naturales para estimular la circulación, promover la elasticidad de la piel y reducir la apariencia de la celulitis.
Los masajes y tratamientos específicos, como el drenaje linfático manual o la terapia de vacío, pueden ayudar a mejorar y a activar la circulación, reducir la retención de líquidos y suavizar la apariencia de la celulitis. En casos más severos de celulitis, se pueden considerar procedimientos médicos y estéticos, como la terapia con láser, la radiofrecuencia, la liposucción o la mesoterapia. Estos tratamientos suelen realizarse en consultorios médicos o clínicas especializadas y pueden requerir varias sesiones para obtener resultados óptimos.
Ahora que conoces cómo combatir la celulitis y cuáles son sus tipos, es posible que quieras seguir profundizando en ella. Si quieres aprender más sobre los diferentes tratamientos estéticos que se pueden utilizar para mejorar la apariencia de la piel, te animamos a realizar el Curso en Medicina Estética: Tratamientos Corporales, el Curso de Masaje y Drenaje aplicado a la Estética Integral o el Master en Estética Dermatológica en INESALUD.