¿Cómo detectar un shock anafiláctico?
El shock anafiláctico es una respuesta extrema del sistema inmunológico que surge a través de una sustancia a la que la persona es alérgica, conocida como alérgeno. Esta respuesta afecta múltiples sistemas del cuerpo de manera rápida, por lo que puede poner en riesgo la vida de la persona.
Así pues, el shock anafiláctico surge a consecuencia de una anafilaxia producida a modo de reacción alérgica grave y potencialmente mortal.
Escrito por Marina Ródenas Espinosa, enfermera y docente del área de enfermería de INESALUD.
Diferencia entre shock anafiláctico y reacción alérgica
La principal diferencia entre ambos conceptos radica en la intensidad, magnitud y gravedad de la respuesta del sistema inmunológica ante la presencia del alérgeno.
Comparando la intensidad y magnitud, una reacción alérgica puede manifestarse con síntomas locales y molestias específicas en el área afectada, como picazón, enrojecimiento o sarpullido. Y un shock anafiláctico implica una respuesta sistémica más severa que afecta a todo el organismo, involucrando múltiples sistemas y órganos.
Por otro lado, si comparamos la progresión, la reacción alérgica se desarrollan lentamente y tienden a ser más localizadas, permitiendo tiempo para su detección, intervención y tratamiento. En cambio, en caso de un shock los síntomas progresan rápidamente y requieren de una intervención urgente.
Así pues, se puede afirmar que la reacción alérgica es local y menos grave, mientras que el shock anafiláctico es una emergencia grave y sistémica.
¿Por qué se produce?
El shock anafiláctico se desencadena cuando una persona alérgica entra en contacto con un alérgeno específico.
Entre las sustancias desencadenantes comunes se incluyen:
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Alimentos: Habitualmente se da en alimentos como frutos secos (como cacahuetes y nueces), pescado, mariscos, huevos, leche y productos lácteos.
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Picaduras de insectos: Más comúnmente con las picaduras de abejas o avispas, aunque también se da en caso de picaduras de hormigas, mosquitos o arañas.
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Medicamentos: Hay algunos medicamentos que suelen provocar reacciones alérgicas o shock anafiláctico, como, por ejemplo, la penicilina, aspirina, metamizol o paracetamol.
Cuando hay una exposición repetida al alérgeno, el cuerpo produce y almacena inmunoglobulina E (IgE). En el encuentro subsiguiente con el alérgeno, la IgE activa células especializadas, como los mastocitos y los basófilos, que liberan cantidades significativas de sustancias químicas, incluyendo histamina.
Posteriormente, la histamina desencadena una serie de eventos, incluyendo la dilatación de los vasos sanguíneos, aumento de la permeabilidad vascular y contracción de los músculos lisos.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas de un episodio de anafilaxia dependerán de los órganos afectados.
Esta reacción conlleva un impacto significativo en el sistema cardiovascular, dando lugar a hipotensión, arritmias e incluso paro cardiaco.
En lo que respecta al sistema respiratorio, la complicación más seria se presenta como asfixia (dificultad para respirar), principalmente debido a la inflamación de las vías respiratorias.
También se incluyen el dolor abdominal, vómitos, diarrea, congestión nasal, náuseas, urticaria, enrojecimiento, convulsiones y pérdida de consciencia.
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¿Cómo se trata?
Es muy importante iniciar el tratamiento del shock anafiláctico lo antes posible mediante la administración urgente de adrenalina.
La adrenalina, también llamada epinefrina, contrarresta los efectos de la reacción alérgica y restaura la presión arterial. Se administra mediante una inyección intramuscular, preferiblemente en la parte externa del muslo.
La inyección intramuscular es más rápida y eficaz que la administración subcutánea, ya que la epinefrina se absorbe más rápidamente en el torrente sanguíneo.
La dosis puede variar según la edad y el peso del paciente. En general, se administra una dosis inicial, pero en casos graves o si los síntomas persisten, puede ser necesario administrar dosis adicionales generalmente después de 5-15 minutos de la primera inyección.
¿Qué precauciones deben tomar los pacientes alérgicos?
Las personas que tienen riesgo de sufrir reacciones alérgicas graves, especialmente aquellas propensas al shock anafiláctico, deben tomar precauciones y seguir ciertos consejos para prevenir y manejar eficazmente las situaciones de emergencia que puedan surgir.
En primer lugar, deben saber identificar y conocer los alérgenos específicos que pueden desencadenar una reacción alérgica o shock anafiláctico. Además, también es importante que lleven consigo un kit de emergencia que contenga adrenalina autoinyectable y tenerlo siempre disponible, ya que pueden estar en contacto con el alérgeno en cualquier momento.
Por otro lado, deben aprender y enseñar a las personas de su círculo cercano a utilizar el autoinyector de la medicación. Además de que estas personas deben estar a corriente de cuáles son los alérgenos y los síntomas ante esta emergencia.
Aquellas personas con alergia a alimentos deben leer detenidamente sus etiquetas antes de consumir cualquier alimento, revisando los posibles alérgenos ocultos y evitar la exposición accidental.
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