Cómo recuperarse de un esguince de tobillo: guía completa

Cómo recuperarse de un esguince de tobillo

El esguince de tobillo es una lesión que afecta a los ligamentos, los tejidos que conectan los huesos. Se produce cuando estos ligamentos se estiran demasiado o se desgarran. Se trata de una lesión muy común. Por esta razón, hablamos de cómo recuperarse de un esguince de tobillo.

Generalmente, los esguinces son causados por un movimiento brusco, por ejemplo haciendo ejercicio, o por una mala pisada, con frecuencia debido a un terreno irregular. Sucede con mayor frecuencia al girar el pie hacia adentro, es decir, un esguince de inversión. 

¿Cuál es el tratamiento para un esguince de tobillo?

La articulación del tobillo (compuesta por la tibia, peroné, ligamentos y astrágalo) es sensible. Por esta razón, cuando se lesiona causa dolor debido a la inflamación. El tratamiento dependerá de la gravedad del esguince. No obstante, suele seguir el modelo PRICE (Protección - Reposo - Hielo - Compresión con vendaje - Elevación). 

Cuando el esguince tiene una mayor gravedad, pero moderada, se requiere de inmovilización y también fisioterapia en una segunda fase de recuperación. En algunos casos, cuando el esguince es muy grave, puede requerirse de una intervención quirúrgica para reparar el ligamento. 

cómo recuperarse de un esguince de tobillo

Clasificación de los esguinces

Como hemos señalado, el tipo de tratamiento de un esguince y la recuperación dependen del tipo y gravedad. Los esguinces pueden clasificarse en diferentes grados de acuerdo a su gravedad: primer, segundo o tercer grado. Además, de acuerdo con el Manual MSD para profesionales, pueden también clasificarse por el tipo de lesión que causan. 

  • Esguince por inversión que afectan a la región anterolateral, mientras que los esguinces de eversión afectan al ligamento deltoideo. 
  • Fractura de Maisonneuve se causan en el peroné proximal o el tobillo lateral o medial. 
  • Desgarros completos suceden cuando se afectan ambos ligamentos (lateral y medial), y este suele tener una reacción de mayor inflamación, incluso con forma de huevo. 

¿Cuánto tarda en curarse un esguince de tobillo?

El tiempo de recuperación varía según la gravedad del esguince:

  • Grado I: Leve, con dolor e inflamación leves. Se suele curar en 1-2 semanas.
  • Grado II: Moderado, con dolor e inflamación más intensos y posible inestabilidad del tobillo. La recuperación puede durar 2-4 semanas.
  • Grado III: Grave, con dolor intenso, inestabilidad y posible daño en los ligamentos. La recuperación puede tardar 6-8 semanas o más.

¿Cómo saber si es esguince grado 1 o 2?

  • Grado I: Dolor leve, hinchazón moderada, hematoma pequeño, caminar con dificultad.
  • Grado II: Dolor moderado-intenso, hinchazón importante, hematoma grande, dificultad para caminar. 
  • Grado III: Dolor intenso, hinchazón evidente, hematoma grande, dificultad para caminar o incluso incapacidad de soportar el peso. La sensibilidad es muy alta porque puede estar dañado el nervio también.

¿Cómo se cura más rápido un esguince de tobillo?

En las primeras 48-72 horas:

  • Reposo: Evitar actividades que causen dolor.
  • Hielo: Aplicar hielo en la zona afectada durante 20 minutos cada 2-3 horas.
  • Compresión: Usar una venda elástica para disminuir la inflamación
  • Elevación: Mantener el tobillo elevado, extendiendo la pierna. 

En los días posteriores:

  • Medicamentos: El/la profesional podrá recetar antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) como ibuprofeno o naproxeno para el dolor y la inflamación.
  • Ejercicios de fortalecimiento: Fortalecer los músculos del tobillo para mejorar la estabilidad. Se trata de terapia que debe ser dirigida por un fisioterapeuta, quien ayudará a diseñar un programa de ejercicios adecuado para la recuperación.

Consejos para evitar recaídas

Ante la pregunta de cómo recuperarse de un esguince de tobillo, es clave señalar que no solo se trata de cuidarse inmediatamente después del accidente que causó el esguince, sino que es necesario cuidarse para evitar una recaída. Por tal razón es clave:

  • Volver gradualmente a la actividad física. No forzar el tobillo y empezar con actividades de bajo impacto.
  • Usar calzado adecuado. Usar zapatos con buen soporte para el tobillo.
  • Evitar movimientos bruscos. Tener cuidado al caminar o correr sobre superficies irregulares.
  • Acudir a profesionales sanitarios. Una evaluación y tratamiento adecuados son clave, por lo que automedicarse o tratarse es contraproducente. 

Es importante recordar que un tobillo mal curado puede aumentar el riesgo de sufrir nuevos esguinces en el futuro. Por lo tanto, es fundamental seguir las recomendaciones del/a médico/a y fisioterapeuta durante la recuperación.

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