El ejercicio es tu mejor aliado al estudiar oposiciones

La preparación de exámenes como las oposiciones o el MIR, EIR, PIR, etc son una etapa que demanda un gran esfuerzo tanto mental como físico. Que lo confirme aquellas personas que han hecho largas jornadas de estudio con un solo objetivo en la mente: ¡aprobar y cumplir metas!

Sin embargo, no es un secreto que las largas jornadas de estudio, la presión por alcanzar los objetivos y la necesidad de mantener la concentración pueden generar un desgaste considerable. En este contexto, la práctica regular de deporte puede convertirse en un aliado fundamental para optimizar el rendimiento académico y mejorar la calidad de vida.

¿Lo sabías? En este artículo te contamos (con base científica) cómo hacer ejercicio será tu mejor aliado al estudiar una oposición. ¡Prepara tus mallas y zapatillas!

Escrito por María Fernanda Ramírez, periodista especializada en salud y redactora de INESALUD. 

Beneficios físicos del deporte en el estudio

Cualquier profesional de la salud sabe que existen decenas de buenas razones para realizar actividad física, como mantener una buena salud cardiovascular o disminuir el riesgo de enfermedades como diabetes o diversos tipos de cáncer.

No obstante, múltiples investigaciones han apuntado a que el ejercicio también tiene un efecto positivo en las funciones cognitivas. Asimismo, al promover la salud general, también impactará en el bienestar y la capacidad de estudio. Y es que lleva razón el refrán popular: ¡Mente sana en cuerpo sano! Así, los principales beneficios de hacer ejercicio al estudiar las oposiciones son:

Mayor capacidad de concentración y rendimiento académico

El ejercicio regular mejora la circulación sanguínea y la oxigenación cerebral, lo que favorece la concentración y la capacidad de aprendizaje. Además, ayuda a reducir la fatiga mental y a mantener la atención durante períodos prolongados.

Una publicación de la National Library of Medicine de los EE. UU. analizó el impacto de la actividad física en el rendimiento escolar de los niños y niñas. Los resultados sugirieron que la actividad física no solo mejora la condición física, sino que también tiene efectos positivos a nivel cognitivo y cerebral que impactan a lo largo de la vida.  Encontraron que aumentar la capacidad aeróbica, que se logra con el ejercicio, fortalece el cerebro y mejora su función, lo cual se traduce en un mejor rendimiento académico, especialmente en asignaturas que requieren habilidades cognitivas complejas como matemáticas, lectura e inglés.

Mejora de la memoria

Diversos estudios han demostrado que el ejercicio físico puede mejorar los sistemas de memoria en diversas formas. Por ejemplo, aporta a la neurogénesis y ayuda a estimular el hipocampo, una región del cerebro asociada a la memoria y al aprendizaje.

Una investigación que analizó las implicaciones del ejercicio en personas mayores encontró que la actividad aeróbica moderada y frecuente se asocia con un mejor rendimiento neurocognitivo en este grupo de personas. "La mejor circulación cerebral, los factores neurotróficos, la biogénesis mitocondrial y la liberación de numerosas moléculas de señalización, incluidas las mioquinas y las adipoquinas en respuesta al ejercicio regular, podrían estar implicadas en los mecanismos neuroprotectores del entrenamiento físico", señala la publicación. 

Mayor resistencia física y energía

El ejercicio físico fortalece el sistema cardiovascular y aumenta la capacidad pulmonar, lo que se traduce en una mayor resistencia física. Esto permite afrontar las largas jornadas de estudio con mayor vitalidad y reducir la sensación de fatiga.

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Mejora de la salud mental

La actividad física es fundamental para mejorar el estado de ánimo. Al liberar endorfinas, neurotransmisores asociados al placer y al bienestar. Por esta razón, el deporte ayuda a reducir el estrés, la ansiedad y la irritabilidad, comunes durante los períodos de estudio intenso.

Mentalidad positiva y autoestima

La superación de retos físicos a través del deporte fomenta una actitud positiva y mejora la autoestima. Sentirse capaz de alcanzar metas, por pequeñas que sean, refuerza la confianza en uno mismo y facilita la perseverancia en el estudio.

Estrategias para integrar el deporte en una rutina de estudio intensa

Si estás preparando un examen o estudiando unas oposiciones, es posible que sientas que no te queda tiempo para nada... Sin embargo, no debe ser así: todo se trata de un balance.  Aunque incorporar el ejercicio en una rutina de estudio puede parecer complicado, con un poco de organización es posible.

• Planifica tus sesiones de entrenamiento: Dedica un espacio específico en tu agenda para hacer ejercicio y cúmplelo. Aunque  veces te de pereza realizarlo o te sientas cansado/a, verás que el ejercicio te ayudará a sentirte más enérgico/a si lo practicas con regularidad. 
• Elige actividades que disfrutes: Si te gusta lo que haces, será más fácil mantener la motivación. ¡Pon música que te invite a moverte! Correr, nadar, levantar peso, ir al gimnasio, una clase de zumba... ¡Hay opciones para todos los gustos!
• Comienza de forma gradual: Si eres nuevo en el ejercicio, comienza con sesiones cortas y de baja intensidad y aumenta gradualmente la duración y la dificultad. Si te es posible, consulta con un/a entrenador que pueda ayudarte a diseñar una rutina personalizada. 
• Busca un/a compañero/a de entrenamiento: Entrenar con alguien puede ser más divertido y te ayudará a mantener la constancia. ¡Con seguridad no eres la única persona a la que le vendrá bien ejercitarse!

Tipos de ejercicios recomendados

• Deportes aeróbicos: Correr, nadar, andar en bicicleta... son excelentes opciones para mejorar la resistencia cardiovascular y reducir el estrés.
• Entrenamiento de fuerza: Realizar ejercicios de fuerza con el propio peso corporal o con pesas ayuda a fortalecer los músculos y a mejorar la postura.
• Yoga y pilates: Estas disciplinas combinan ejercicios físicos con técnicas de respiración y meditación, lo que favorece la relajación y el equilibrio cuerpo-mente.

Rutinas rápidas y efectivas

No tiene que convertirte en un/a deportista de élite para beneficiarte del ejercicio. Si tienes poco tiempo, existen rutinas cortas que te permitirán aprovechar al máximo. Youtube, entrenadores, gimnasios... Tienes muchas opciones y pocas excusas para mantenerte activo/a.

• En casa: Puedes realizar circuitos de entrenamiento de alta intensidad (HIIT) con ejercicios como sentadillas, flexiones, burpees y abdominales.
• En el gimnasio: Aprovecha las clases colectivas como zumba, spinning o CrossFit para variar tus rutinas y mantener la motivación.

Recuerda que la práctica regular de deporte es una inversión en tu salud física y mental que te permitirá estudiar las oposiciones o exámenes con mayor energía y eficacia. Recuerda que la clave está en encontrar un tipo de actividad que te guste y adaptarla a tu ritmo de vida. ¡Comienza hoy mismo a disfrutar de los beneficios del ejercicio!

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Referencias 

Babaei, P., & Azari, H. B. (2022). Exercise training improves memory performance in older adults: A narrative review of evidence and possible mechanisms. Frontiers in human neuroscience, 15. https://doi.org/10.3389/fnhum.2021.771553

Kohl, H. W., III, Cook, H. D., Committee on Physical Activity and Physical Education, Food and Nutrition Board, & Institute of Medicine. (2013). Physical activity, fitness, and physical education: Effects on academic performance. National Academies Press.

Loprinzi, P. D., Roig, M., Etnier, J. L., Tomporowski, P. D., & Voss, M. (2021). Acute and chronic exercise effects on human memory: What we know and where to go from here. Journal of Clinical Medicine, 10(21), 4812. https://doi.org/10.3390/jcm10214812