¿Adiós a las patatas de jamón? La verdad detrás de los aditivos que prohibirá la UE
¿A quién no le gustan las patatas fritas? Y es que, aunque no sean las más sanas, se trata de uno de los snacks favoritos en el mundo. Se pueden encontrar prácticamente en todos los países y, muchas veces, con peculiariedades propias de cada lugar. En España, las patatas de jamón, huevo roto o vinagre ya son todo un clásico. Por eso, la noticia de que las patatas de jamón serán prohibidas a generado tanto revuelo.
Pero... ¿Es cierto que se prohibirán las patatas con sabor a jamón? No exactamente. Lo cierto es que la Unión Europea EU ha decidido prohibir el uso de ocho aditivos por el peligro que representan para la salud.
Escrito por María Fernanda Ramírez, periodista especializada en salud y redactora de INESALUD.
Los titulares y los bulos alrededor de las patatas fritas con sabor a jamón han hecho que la propia Comisión Europea haya tenido que aclarar lo que está pasando.
🧵Últimamente has podido leer muchos titulares anunciando que ⚠️"La UE prohíbe las patatas sabor jamón"
— Comisión Europea (@ComisionEuropea) July 31, 2024
👉¿Es verdad?
🔴No❗️ Algunos aditivos de aroma ahumado utilizados para su producción, por lo que con una receta que no incluya estos aditivos se podrán seguir fabricando.
¿Qué son los aditivos?
Los aditivos alimentarios son sustancias que se añaden a los alimentos con el propósito de mejorar o agregar características a su sabor, apariencia, conservación, o textura. En la Unión Europea, los aditivos que se venden por sí solos o como parte de productos alimenticios deben cumplir con estrictas normas para garantizar la seguridad y transparencia para los/as consumidores.
Los aditivos se clasifican en varias categorías, según su función específica en los alimentos. Algunas de las categorías más comunes incluyen:
- Edulcorantes: Utilizados para dar un sabor dulce a los alimentos sin añadir calorías o azúcar en exceso.
- Conservantes: Ayudan a prolongar la vida útil de los alimentos, evitando su deterioro causado por microorganismos.
- Antioxidantes: Protegen los alimentos de la oxidación, un proceso que puede causar cambios indeseados en su sabor, color o valor nutricional.
- Colorantes: Se añaden para mejorar o restaurar el color natural de los alimentos.
En la lista de ingredientes de un producto, la mayoría de los aditivos alimentarios deben ser mencionados por su categoría, como "antioxidante" o "conservante", seguidos del nombre específico del aditivo o su número E (un código de identificación de aditivos en la UE). Esto facilita a los consumidores identificar los aditivos presentes en los alimentos que consumen y comprender mejor su función.
¿Cuáles fueron los aditivos prohibidos y por qué?
Los aditivos que fueron prohibidos están específicamente relacionados con el sabor ahumado, conseguido con compuestos químicos y no de forma natural, tan característico de los productos con sabor a “barbacoa”. No obstante, también está presente en otro tipo de productos como el bacon o ciertos embutidos o comidas preparadas.
Estos productos químicos fueron analizados por la EFSA (European Food Safety Authority) para determinar si se les otorgaba una renovación de la autorización para su empleo en alimentos, que lleva más de una década.
No obstante, la Comisión rechazó la renovación del permiso para los productos primarios destinados a la producción de aromas de humo SF-001, SF-002, SF-003, SF-004, SF-005, SF-006, SF-008 y SF-009. Estos, también son conocidos como:
- ProFragus SmokeR714 (SF-001)
- Zesti Smoke Code 10 (SF-002)
- Concentrado de humo (SF-003)
- Scansmoke SEF525 (SF-004)
- SmoKEz C-10 (SF-005)
- SmokEz Enviro-23 (SF-006)
- ProFagus SmokeR709 (SF-008)
- Fumokomp (SF-009)
La norma de prohibición entrará en vigor a partir del 2025. Sin embargo, los comerciantes tendrán como fecha máxima para retirar los productos del mercado con estos compuestos hasta 2029.
¿Por qué fueron prohibidos?
Basándose en las pruebas científicas disponibles, la EFSA no pudo descartar la preocupación por la genotoxicidad de ninguno de los ocho aromas de humo en cuestión.
Por su parte, la genotoxicidad es la capacidad de una sustancia química para dañar el material genético de las células. Los cambios o mutaciones en la información genética de una célula pueden aumentar el riesgo de desarrollar afecciones como el cáncer y enfermedades hereditarias.
Por esto, la EFSA optó por proteger la salud pública. En definitiva, aunque la noticia pueda causar preocupación, es una medida preventiva clave para garantizar que lo que consumimos sea lo más seguro posible. La industria alimentaria deberá ajustarse a estas nuevas normativas, y como consumidores, es crucial que estemos informados/as y seamos conscientes de lo que estamos ingiriendo.
Formaciones que te sugerimos
Curso de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Titulación Universitaria + 8 Créditos ECTS)
Curso de Nutrición y Obesidad Infantil (Titulación Universitaria + 8 Créditos ECTS)
Referencias
Management Board members, Executive Director, & Operational Management. (2023, noviembre 16). Smoke flavourings: Q&A with Wim Mennes, EFSA’s working group chair on flavourings. European Food Safety Authority. https://www.efsa.europa.eu/en/news/smoke-flavourings-qa-wim-mennes-efsas-working-group-chair-flavourings