Recigarum: Conoce las pastillas para dejar de fumar que financiará Sanidad

El Ministerio de Sanidad de España ha anunciado que financiará el tratamiento con Recigarum a los fumadores que consuman al menos 10 cigarrillos diarios y que no hayan tenido éxito abandonando el hábito. Se trata del segundo tratamiento con pastillas para dejar de fumar que será financiado por Sanidad. En este artículo, te contamos cómo funciona y cuáles serán los requisitos para acceder a él. 

Escrito por María Fernanda Ramírez Ramos, periodista especializada en salud y redactora de INESALUD. 

Para los fumadores que buscan una forma efectiva de dejar atrás el tabaco, Recigarum es una opción más. Este medicamento tiene como principio activo la citisiniclina, la cual tiene una estructura similar a la nicotina. De esta forma, se une a los mismos receptores de la nicotina, desplazando a esta, y mitigando sus efectos en el cerebro. En consecuencia, disminuye sus efectos adictivos sobre el cuerpo y ayuda a aliviar la ansiedad por fumar. 

Recigarum ofrece a los adultos mayores de 18 años una herramienta en el tratamiento de la dependencia tabáquica y la reducción de la ansiedad relacionada con la nicotina. Esto significa que es un medicamento para aliviar el famoso "mono" por fumar, para aquellos que fuman más de 10 cigarrillos al día.

En este sentido, ayuda a las personas a cambiar sus hábitos, mitigando o reduciendo los síntomas de la abstinencia, que incluyen cambios en el estado de ánimo, irritabilidad, insomnio, dolor de cabeza y aumento del apetito, además de la ansiedad. 

El precio inicial del medicamento asciende a 111,09 euros. La financiación pública del Ministerio de Sanidad, aportará entre el 40% y el 60%. Sin embargo, la persona que desee acceder deberá cumplir algunos requisitos de evaluación médica. Además, tendrán que estar en un programa de apoyo para dejar el tabaco. Adicionalmente, deberán demostrar que en el último año han intentado dejar de fumar.

¿Cómo es el tratamiento de las pastillas para dejar de fumar?

Como hemos mencionado, la citisiniclina es el componente principal de Recigarum. Se trata de un alcaloide vegetal que se extrae de árbole y que también se utiliza para tratar migrañas, estreñimiento o problemas de sueño.  Este principio activo también es usado por el Todacitán, otras pastillas para dejar de fumar que están incluidas en la lista de productos financiados por el gobierno de España.

Lo más destacado tanto de Todacitán y Recigarum radica en su capacidad para ayudar a los fumadores a abandonar el hábito sin experimentar los molestos síntomas de abstinencia. A diferencia de Todacitán, Recigarum viene en un blíster que indica en un calendario cómo debe tomarse el medicamento. Asimismo, contiene aspartamo y sabor mentolado, lo que lo hace más agradable.

Un envase de Recigarum contiene 100 comprimidos, que proporcionan la cantidad necesaria para llevar a cabo un tratamiento completo, el cual tiene una duración de 25 días. Este medicamento está diseñado para ser administrado por vía oral y se debe ingerir con la cantidad adecuada de agua siguiendo las instrucciones del médico/a que lo receta. 

Durante los primeros tres días, las indiciaciones recomendadas son tomar un comprimido cada dos horas, con un límite máximo de seis comprimidos al día. A medida que avanza el tratamiento, la frecuencia de toma se reduce gradualmente, llegando a un intervalo de solo uno o dos comprimidos entre los días 21 y 25. Este tratamiento será financiado una vez al año.

Posibles efectos secundarios

Para empezar es preciso señalar que este medicamento no está aprobado para menores de 18 años. Por otra parte, se desconoce si la citisiniclina tiene efectos adversos sobre los anticonceptivos hormonales para mujeres. Por tal razón, se recomienda usar métodos de barrera durante el tratamiento. 

Los efectos secundarios más comunes de este tratamiento, que pueden afectar a más de 1 de cada 10 pacientes, abarcan una amplia gama de síntomas. Incluyen cambios en el apetito, aumento de peso, mareos, irritabilidad, cambios de humor, ansiedad, aumento de la presión arterial (hipertensión), sequedad de boca, diarrea, erupción cutánea, agotamiento, trastornos del sueño, dolores de cabeza, aumento de la frecuencia cardíaca, náuseas, alteración del gusto, acidez, estreñimiento, vómitos, dolor abdominal y dolor muscular. Sin embargo, tienden a desaparecer a medida que se avanza en el tratamiento y pueden estar relacionados con el mismo abandono del cigarrillo.

Por otra parte, tras el quinto día de inicio del tratamiento no se debe fumar. De lo contrario, podrían empeorar los efectos de la abstinencia y de los medicamentos.

En resumen, Recigarum emerge como un aliado en la lucha contra el tabaco, brindando a los fumadores una nueva alternativa para superar la adicción. Gracias a su financiación pública anual y su eficacia en el tratamiento de la dependencia tabáquica, este medicamento se convierte en una opción atractiva para aquellos que desean dejar de fumar de una vez por todas. Hay que recordar que, según las cifras de la OMS, el tabaquismo causa más de 8 millones de defunciones al año.

Referencias bibliográficas:

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