Anatomía de la memoria: así se forman los recuerdos

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La memoria, esa capacidad esencial que nos permite retener, almacenar y recuperar información, es un proceso complejo arraigado en la anatomía y la fisiología del cerebro humano. Desde los recuerdos fugaces hasta las memorias más antiguas, la capacidad de recordar es una función cerebral dinámica que involucra una red variada de estructuras y procesos. 


Escrito por Cristina Molina Gallego, psicóloga y docente del área de psicología de INESALUD.   


“El concepto más central de la memoria es el recuerdo, es decir la presencia en la mente de algo pasado, un ingrediente indispensable para el pensamiento y otras actividades cognitivas” (Díaz, 2009). 

Fundamentos neurológicos de la memoria 

El cerebro, con su complejidad añadida, contiene varios sistemas interconectados que contribuyen a la formación y recuperación de la memoria. Las estructuras clave involucradas en este proceso incluyen: 

1. Hipocampo 

Este componente del cerebro desempeña un papel esencial en la consolidación de la memoria a corto y largo plazo. Situado en el lóbulo temporal medial, el hipocampo ayuda en la transferencia de la información de la memoria a corto plazo a una forma más permanente y estable en la memoria a largo plazo. 

2. Corteza cerebral

La corteza cerebral, la capa externa del cerebro, está dividida en múltiples regiones, cada una especializada en diferentes tipos de memoria y funciones cognitivas.

La corteza prefrontal, por ejemplo, está implicada en la memoria de trabajo, la capacidad para retener información a corto plazo y utilizarla para tareas específicas. Por otro lado, la corteza temporal medial está asociada con la recuperación de la memoria episódica, que incluye recuerdos de eventos y experiencias personales. 

3. Amígdala 

Esta estructura cerebral desempeña un papel crucial en el procesamiento de las emociones vinculadas a los recuerdos. Los recuerdos con carga emocional tienden a estar más firmemente arraigados en la memoria debido a la influencia de la amígdala. 

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Pero, ¿cómo se forma y recupera la memoria? 

En el ámbito de la memoria, el proceso de recuperación o recuerdo consiste en la evocación de sucesos, eventos o información almacenada en el pasado. Desde el punto de vista del procesamiento de la información, este es uno de los tres procesos principales de la memoria, junto a la codificación y al almacenamiento.​

Estas formas de recuerdo se han estudiado desde el campo de la psicología como un modo de comprender el funcionamiento de los procesos memorísticos en humanos​ y otros animales.​ 

La memoria no es un proceso estático, sino más bien dinámico y complejo, que implica múltiples etapas: 

Codificación

Es el proceso mediante el cual la información se registra inicialmente en el cerebro. Implica la interpretación y transformación de la información sensorial en un formato que el cerebro puede almacenar. 

Almacenamiento

Una vez codificada, la información se almacena en diversas áreas del cerebro, distribuida en función de su tipo y naturaleza. 

Recuperación

Este proceso implica la recuperación de la información almacenada cuando es necesaria. La memoria puede ser evocada por diferentes estímulos, asociaciones o recordatorios, y la precisión de la recuperación puede variar según varios factores, como la intensidad emocional o la práctica repetida. 

Es importante tener en cuenta que la memoria puede ser influenciada por múltiples factores y que cada individuo puede experimentar variaciones en su capacidad de recordar debido a la interacción de estos factores en su vida diaria. En casos donde la pérdida de memoria afecta significativamente la calidad de vida, es recomendable buscar orientación médica para un diagnóstico adecuado y tratamiento. 

La memoria, un fenómeno fascinante

En conclusión, en los últimos tiempos, nuevas redes han ido descubiertas en el cerebro. Utilizando un enfoque novedoso de neuroimagen de precisión e imágenes de resonancia magnética funcional de alta resolución, los neurocientíficos y físicos se han aventurado en las profundidades del sistema de memoria humana. Descubrieron redes corticales previamente desconocidas y arrojaron luz sobre la organización anatómica del sistema de memoria humana.  

Esto es, la memoria es un fenómeno fascinante que implica una compleja interacción entre diversas áreas del cerebro. Comprender su anatomía y funcionamiento nos ofrece perspectivas valiosas sobre cómo se forma, almacena y recupera la información en el cerebro humano. Este conocimiento puede ser fundamental para mejorar la calidad de vida de aquellos que sufren trastornos de la memoria y para el desarrollo de estrategias educativas más efectivas que aprovechen al máximo esta capacidad cognitiva fundamental. 

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Referencias

Dı́az, J. L. (2009). Persona, mente y memoria. Salud Mental, 32(6), 513-526. https://www.medigraphic.com/pdfs/salmen/sam-2009/sam096i.pdf 

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