¿Cómo cuidar las almohadillas de mi perro?

Si tienes un perro seguro que alguna vez te has preguntado si estás cuidando bien de tu mascota. Su pelo, alimentación, uñas, orejas, dientes son algunas de las partes que más reciben nuestra atención. Sin embargo, hay otras zonas a las que debes prestar atención. Si alguna vez te has hecho la pregunta de "¿Cómo cuidar las almohadillas de mi perro?", este artículo es para ti. 

Escrito por María Elena Martín Estepa, veterinaria y docente del área de sanidad de INESALUD.

¿Qué son las almohadillas y para qué sirven?

Las almohadillas son el tejido sin pelo de las patas que está en contacto directo con el suelo. De hecho, actúan del mismo modo que las plantas de nuestros pies. Este tejido se caracteriza por mostrar de forma superficial una clase de piel más oscura y gruesa debido a las propiedades de la queratina, una proteína que hace que esta parte del cuerpo del perro sea resistente a la fricción que se produce al entrar en contacto con el suelo.

Cabe destacar que esta dureza que presentan las almohadillas va desarrollándose a la vez que el animal crece y aumenta de peso. Por debajo, las almohadillas de los perros poseen una capa de grasa que sirve para amortiguar sus pisadas, evitando así que sus articulaciones y huesos sufran algún tipo de daño por efecto de agentes externos.

Las almohadillas de los perros también poseen unas glándulas odoríferas que les permiten marcar su territorio dejando su olor, es por esto que muchas veces vemos a los perros escarbar después de orinar o defecar. De esta forma hacen marcaje de territorio. Este comportamiento se verá menos acentuado si tu perro está castrado desde joven.

Por otro lado, también poseen glándulas sudoríparas en sus almohadillas, por lo que permiten al perro transpirar y, por tanto, regular su temperatura corporal. Se trata de un factor importante, ya que los perros solo disponen de glándulas sudoríparas en las almohadillas y en su nariz o trufa.

¿Cómo cuidar las almohadillas de mi perro en verano?

Ahora que estamos en una temporada de altas temperaturas, debemos tener en cuenta que el suelo y el asfalto está a una temperatura muy elevada (hasta 70 centígrados grados al sol), lo que puede provocar quemaduras en las almohadillas.

Para evitar las quemaduras no saques a tu perro en las horas de más calor y, antes de hacerlo, toca el suelo durante 5 segundos. Si te quema, seguro que sus almohadillas también se quemarán. En la época estival te recomendamos que saques a tu perro por la mañana temprano y por la noche cuando el sol se está yendo.

Si necesitas sacarlo en las horas de más calor, es mejor llevarlos a zonas frescas donde no corran el riesgo de sufrir quemaduras o un golpe de calor. Es preferible ir a zonas ajardinadas o con césped y hierba, evitando el asfalto, la arena y los pavimentos y suelos que absorben el calor.

Asimismo, si no tienes otra opción que sacar a tu perrito en las horas de más calor, puedes optar por probar a usar unas botas especiales, aunque puede que no se acostumbre a ellas o le hagan rozaduras, en cuyo caso es mejor no usarlas.

La regla de los 5 segundos: la mejor aliada frente al calor

La regla de los 5 segundos es una técnica muy sencilla para saber si es conveniente o no que tu perro pise el asfalto. Consiste únicamente en que apoyes la mano durante 5 segundos sobre el asfalto y, si te cuesta mantenerla, por su alta temperatura, debes evitar sacar a tu perro. En caso contrario se quemaría sus almohadillas.

Para realizarla debes apoyar la mano en una zona donde no haya sombra ni nada que refresque el asfalto, ya que la idea es prevenir la máxima temperatura posible a la que puedes llegar a exponer las almohadillas de tu peludo.

¿Qué hacer si mi perro empieza a cojear?

Revisa sus almohadillas, a veces se hacen heridas en ellas, se hincan objetos punzantes o se las queman, en cuyo caso debes acudir a un veterinario para tratar su dolencia.

¿Qué hacer si mi perro tiene las almohadillas agrietadas?

Para los casos en que las almohadillas de los perros están secas o agrietadas es útil la administración de geles, cremas, pomadas o ungüentos hechos a base de aloe vera o vaselina, entre otros ingredientes. Son una gran ayuda para mantenerlas hidratadas.

¿Cómo proteger las almohadillas de mi perro?

Un producto que te permitirá proteger sus almohadillas son las cremas diseñadas especialmente para este fin. Estas cremas las deberás aplicar después del paseo, cuando regreséis a casa. Para ello, primero debes limpiar muy bien sus patas y seguir las instrucciones que te indique el producto, y asegúrate de que la crema que elegiste sea especialmente para sus almohadillas, ya que otras cremas (como las que usamos los humanos) pueden dañar la piel de estas.

También debes prestar atención a las patas de tu perro y revisar de vez en cuando el estado de sus almohadillas, para detectar cualquier posible anomalía en ellas.

¡Esperamos que ahora sepas responder a la pregunta sobre cómo cuidar las almohadillas de tu perro! Recuerda que si quieres adentrarte en el mundo de la veterinaria y los animales, puedes echar un vistazo a los cursos que tienes disponibles en nuestra página web. Quizás te interese nuestra formación de auxiliar de veterinaria o de Dermatología veterinaria, en la que aprenderías sobre estos temas y mucho más.