Ambliopía u ojo vago en niños ¿En qué consiste?
El ojo vago, médicamente llamado ambliopía o amaurosis, es una afección que afecta el desarrollo visual normal en los niños y niñas. Se caracteriza por la disminución de la agudeza visual en uno de los ojos. Sucede porque un ojo y el cerebro no se "comunican" de la forma en que deberían, en la recepción de las imágenes. Puede tener diversas causas y la falta de tratamiento oportuno puede conducir a una pérdida permanente de la visión.
Escrito por María Fernanda Ramírez Ramos, periodista especializada en salud y redactora de INESALUD.
La ambliopía u ojo vago es frecuente en infantes, pero es posible corregirla si se trata de forma temprana. Por esta razón es clave hacer un diagnóstico del problema en los primeros años. Un estudio realizado en 2018 sobre la prevalencia de la ambliopía, indica que esta afecta a cerca del 3% de los niños y niñas.
¿Qué causa el ojo vago en niños?
La ambliopía puede tener múltiples causas y, de hecho, sus síntomas pueden ser diferentes en cada niño o niña. Es preciso señalar que se suele desarrollar antes de los 3 años, pues durante los primeros 3 años hay un importante desarrollo de la visión. No obstante, puede aparecer hasta los 8 años, ya que es en este tiempo en el que los ojos generan las conexiones con el cerebro, aunque los primeros 3 sean los más relevantes.
Las causas del ojo vago son diversas, pero las más comunes incluyen:
- Estrabismo: Desviación de la alineación de los ojos.
- Errores de refracción: Astigmatismo, miopía o hipermetropía
- Anisometropía: Diferencia significativa en la graduación óptica entre ambos ojos.
- Catarata congénita: Opacidad del cristalino presente desde el nacimiento.
- Párpados caídos: Obstruyen la visión de un ojo.
Además, se conoce que los niños y niñas con antecedentes familiares de ambliopía, que han nacido prematuros o tienen problemas de desarrollo, tienen más riesgos de desarrollar ojo vago.
¿Cómo se puede detectar el ojo vago en niños?
Es importante detectar el ojo vago a tiempo, ya que para que el tratamiento sea efectivo, es preciso iniciarlo durante la infancia. No obstante, es preciso señalar que no siempre tiene síntomas claros. Además, niñas y niños pequeños pueden no ser capaces de manifestar la diferencia de la visión entre un ojo y otro.
Por lo tanto, es necesario cumplir con la realización de las pruebas de cribado desde el nacimiento, con la evaluación del reflejo rojo. En adelante, es necesario cumplir con los controles pediátricos y, si es preciso, oftalmológicos o en optometría con el niño o la niña. En el caso de sospecha de ojo vago, lo más probable es que se realice una prueba de fotodetección y pruebas de agudeza visual.
No obstante, también hay algunos signos que pueden indicar la presencia de ambliopía y/o la necesidad de acudir a un especialista de la visión. Los signos de alerta son:
- Entrecerrar los ojos o inclinar la cabeza para ver mejor.
- Frotarse los ojos con frecuencia.
- Dificultad para leer o seguir objetos en movimiento.
- Sensibilidad a la luz.
- Dolores de cabeza.
Por otra parte, en algunas ocasiones los problemas visuales en los niños y niñas se manifiestan mediante un bajo desempeño escolar o torpeza con algunas habilidades. Por esta razón, cuando un/a menor presenta algún tipo de problema escolar, es fundamental indagar por las razones, porque puede deberse, en este caso, a fallos en su visión.
¿Cómo se trata el ojo vago en niños?
El tratamiento del ojo vago depende de la causa y la edad del niño. Las opciones de tratamiento incluyen:
- Oclusión: Tapar el ojo sano con un parche para estimular el desarrollo visual del ojo ambliope.
- Gafas: Corregir defectos refractivos como la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo.
- Cirugía: En casos de estrabismo o catarata congénita.
- Gotas oculares: El tratamiento puede incluir la aplicación de estas (atropina) que nublan la visión del "ojo bueno" para obligar al otro a funcionar.
El tratamiento temprano es fundamental para recuperar la visión del ojo ambliope. La ambliopía no tratada puede conducir a una pérdida de visión permanente en el ojo afectado.
¿Qué consejos se pueden dar a los padres de niños con ojo vago?
- Llevar a su hijo a revisiones oftalmológicas periódicas, especialmente durante los primeros años de vida.
- Seguir las recomendaciones del oftalmólogo en cuanto al tratamiento.
- Estimular el desarrollo visual del ojo ambliope mediante actividades que le obliguen a usarlo.
El ojo vago es una afección que puede afectar a la visión en la temprana edad. Es importante detectarla a tiempo para poder tratarla de forma efectiva. El tratamiento temprano puede ayudar a recuperar la visión del ojo ambliope y mejorar la calidad de vida del niño o niña.
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Referencias
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